Espíritu Santo Luz y Poder,
te agradecemos la fuerza que nos das,
para que en ella podamos apoyarnos y caminar.
Tú que ahondas en lo profundo de nuestro ser,
y avivas la llama de nuestra fe,
libéranos de todo lo impuro que podamos albergar,
en nuestro pobre corazón.
Te pedimos que con tu Amor,
nos hagas entrar dignos de entrar
en las puertas del Eterno.
Amén.