Oh Dios, nuestro Padre,
gracias por habernos dado a Carlos,
modelo de vida para los jóvenes
y mensaje de amor para todos.
Tú haz hecho que se enamore
de tu hijo Jesús,
haciendo de la Eucaristía
su "autopista hacia el cielo".
Tú le has dado a María
como Madre muy amada,
y haz hecho que con el Rosario
se convirtiese en un cantor de su ternura.
Acoge su oración por nosotros.
Mira sobre todo a los pobres,
a quienes él amó y ayudó.
También a mí concédeme,
por su intercesión,
la gracia que necesito...
Y haz que nuestra alegría sea plena,
conduciendo a Carlos entre los beatos
de tu Santa Iglesia,
a fin de que su sonrisa
siga resplandeciendo para nosotros
para gloria de tu nombre.
Amén.