Gracias Jesús, por despertarme este nuevo día

Gracias, Jesús, por despertarme este nuevo día.


Dame vigor y alegría para servir con generosidad a mis hermanos.


No permitas que el demonio apague el fuego de tu amor ahogandome en las aguas sucias del egoísmo, soberbia, y pereza.


Renuevo mi consagración viviendo con amor mis promesas bautismales.


Dame tu Santo Espíritu para que sea hoy mi luz y fortaleza. Ayúdame, Jesús, a no apartarme de Ti para crecer en el camino de la santidad.


Amén.


( después un padre nuestro, ave María y un gloria)