San José, esposo de María, padre virginal de Jesús y mi padre espiritual, me consagro enteramente a ti. Abrazo amorosamente tu paternidad y me refugio bajo tu sagrado manto paternal. Ayúdame hoy a rezar y ser virtuoso. Instrúyeme en la sabiduría de los santos, protégeme de los engaños del enemigo, ayúdame a no pecar, y si hoy expirara mi último aliento, quédate a mi lado y llévame al cielo con Jesús y María.
Amén.
-Padre Donald Calloway, MIC