Aug 17
Salmo 40(39),2.3.4.18.
Esperé confiadamente en el Señor:
él se inclinó hacia mí 
y escuchó mi clamor.
Me sacó de la fosa infernal,

del barro cenagoso;
afianzó mis pies sobre la roca
y afirmó mis pasos.
Puso en mi boca un canto nuevo,

un himno a nuestro Dios.
Muchos, al ver esto, temerán
y confiarán en el Señor.
Yo soy pobre y miserable,

pero el Señor piensa en mí;
tú eres mi ayuda y mi libertador,
¡no tardes, Dios mío!

 


@Evangelizo