Oh Virgen de la Esperanza, nuestra guía y consuelo, intercede por nosotros ante tu Hijo, especialmente por el hijo(a) que llevo en mi vientre, por su salud física, mental y espiritual.
Ayúdame a educarlo(a) desde ya en la fe y a preparar su corazón para la venida de Jesús con la misma paciencia y esperanza con la que esperaste su nacimiento.
Amén.