Gracias padre amado por lo que me has brindado. por lo bueno, lo malo, porque de todo he aprendido y sé que todo lo que vivimos tiene un objetivo. Aunque en algunas ocasiones no entendemos porqué o mas bien el para qué, solo el tiempo y tu nos mostrarán que hay que disfrutar y aprender de esta preciosa vida, que aunque nos traiga cosas no tan buenas, nos dan la gran oportunidad de vivirlas y aprender de ellas.